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Ejercicio de relajación
La nuca se desploma en la tarima,
se disuelve en la alfombra ya ilegible,
se desperezan los rastreles.
Con toda la blandura de tu fuerza,
abandonas tu estado,
claudicas de tu carne.
Y a la madera,
al corcho y al serrín,
a las nupciales luces del origen
y al futuro rumor de haber nacido,
desciendes por la escala de los números,
desciendes por la escala de las letras,
por un hilo de baba,
por un agua infantil.
Te dormirás: serás un pez.
Despertarás: serás un pájaro.
Hay un mar esperándote,
hay un cielo esperándote.
La ocasión de resucitar.
La ocasión de vivir de veras.[/fusion_text][/fusion_builder_column][/fusion_builder_row][/fusion_builder_container]